La FCA, la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido, publicó una extensión de obligación que le exige a 7.000 empresas de servicios financieros, incluidas las empresas de criptomonedas, presentar informes anuales de delitos financieros.
Titulada “Prórroga de la obligación de informar anualmente sobre los delitos financieros”, la nueva extensión de obligación que publicó la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido, la FCA, exige a 7.000 empresas de servicios financieros, incluidas aquellas que prestan servicios con criptomonedas, informar sobre delitos financieros en una presentación anual.
Anteriormente, la declaración de obligación de la FCA le exigía este tipo de informes a solo 2.500 empresas de servicios de las 22.000 presentes y registradas en el país, que están bajo la supervisión de la FCA; pero la autoridad ha decidido ampliar este número e incluir a las empresas de cifrado en sus informes contra el blanqueo de capitales, el lavado de dinero y otros delitos financieros.
Desde 2016, la FCA ha estado supervisando a las empresas que prestan servicios financieros en el país para que cumplan con las normas vigentes sobre el blanqueo de capitales. la autoridad publicó las normas y orientaciones para su propuesta de introducción de una declaración anual de delitos financieros, conocida como REP-CRIM. En el informe anual, las compañías sujetas a la obligación de la autoridad deben informar sobre sus actividades empresariales, independientemente de los ingresos anuales que registre cada una de ellas.
La extensión publicada por la autoridad financiera del Reino Unido incluye a las empresas de criptomonedas junto a los bancos, sociedades de crédito hipotecario, entre otras. La FCA había informado sobre su intención de incluir a las empresas de cifrado en esta obligación desde el año pasado.
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REP-CRIM: Regulación a la tecnología financiera
Como indica la autoridad, la extensión de su régimen REP-CRIM le ayuda a la FCA a supervisar a las empresas sujetas a la normativa de declaración, al proporcionar una serie de indicadores que reflejan el riesgo de blanqueo de capitales inherente a una empresa en específico. La intención, como explica la FCA, es la de garantizar la seguridad e integridad de los inversores al obligar a las empresas y organizaciones a realizar los controles necesarios para evitar, identificar e informar sobre conductas sospechosas y delitos financieros relacionados con el lavado de dinero o el blanqueo de capitales a través de sus plataformas.
A finales de septiembre de 2020, la autoridad abrió una consulta pública para conocer la opinión de las partes interesadas en cuanto a la extensión del alcance de esta obligación, para incluir a las empresas de cifrado.
En el Reino Unido, la regulación aplicable a la cripto industria ha venido cobrando fuerza desde hace algún tiempo. Ahora los exchanges de criptomonedas y los proveedores de servicios de custodia y almacenamiento de activos digitales deben registrarse, de forma obligatoria, ante la autoridad.
También, aquellas empresas dedicadas a ofrecer servicios con productos derivados y notas negociadas en bolsa (ETN) basadas en criptomonedas fueron llamadas a cesar sus servicios ante inversores minoristas y consumidores particulares, en virtud de la protección de los inversores, según citó la FCA en su momento. Esta regulación provocó varias reacciones en la comunidad, que ven un tanto exagerada las medidas impuestas por la FCA, que bien pudo establecer límites de apalancamiento estrictos para proteger a los inversores de pérdidas exponenciales, en lugar de imponer una prohibición completa sobre este tipo de productos financieros.
La autoridad también señaló que la mayor supervisión a la industria cripto responde a la necesidad de hacer cumplir la Ley de Servicios y Mercados Financieros, que incluyen la protección y la mejora de la integridad del sistema financiero del Reino Unido.
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