Al vender NFTs que representan la icónica carpa koi, Yamakoshi, un pintoresco pueblo ubicado en Japón, no solo ha encontrado una forma innovadora de atraer interés y capital, sino que también ha creado una nueva forma de gobernanza comunitaria impulsada por la tecnología blockchain.
El proyecto Neo-Yamakoshi Village representa una fusión innovadora de tradición y tecnología moderna, donde la venta de tokens NFT que simbolizan la carpa koi no solo ha generado un nuevo flujo de ingresos para la comunidad, sino que también ha establecido un modelo de gobernanza descentralizada.
Este enfoque ha permitido a la aldea de Yamakoshi, ubicada en las montañas de Niigata (Japón), atraer a 1.700 «ciudadanos digitales» que están contribuyendo al desarrollo y sostenimiento del pueblo.
Los tokens no fungibles, en este caso, actúan como tokens de gobernanza, otorgando a los propietarios el derecho a participar en las decisiones comunitarias de Yamakoshi mediante la Organización Autónoma Descentralizada (DAO) de la localidad.
Yamakoshi destina los fondos a la comunidad
Matthew Sigel, jefe de investigación de activos digitales de VanEck, destacó en la plataforma X que la iniciativa de NFTs impulsada por el pueblo de Yamakoshi está ayudando a sostener su población envejecida.
Para el 26 de junio, según Sigel, el proyecto había recaudado más de $420.000 dólares mediante la venta de tokens no fungibles.
El proyecto Neo-Yamakoshi Village se lanzó en 2021 y las ganancias generadas hasta la fecha se han dirigido al apoyo de iniciativas comunitarias, como la organización de un día deportivo para los niños de las escuelas locales.
Yamakoshi ha destinado los fondos recaudados a diferentes proyectos comunitarios, poniendo en relieve el potencial de los NFTs para tener un impacto tangible en la vida real.
Neo-Yamakoshi Village sirve de modelo para otros emprendimientos
La estrategia de Yamakoshi no solo aborda los desafíos de las comunidades rurales aisladas, sino que también presenta una aproximación experimental para recaudar fondos destinados a poblaciones envejecidas. La adopción de la tecnología blockchain por parte de Yamakoshi y su inclusión en la visión de «Sociedad 5.0» del Primer Ministro Fumio Kishida, refleja el compromiso de Japón con la integración de tecnologías avanzadas para la creación de una sociedad más sostenible y avanzada.
Por otro lado, la creación de una DAO local podría ser un faro para otras comunidades que buscan formas sostenibles de apoyar a sus poblaciones y preservar sus tradiciones.
La combinación de cultura, arte y tecnología ha permitido a Yamakoshi no solo sostener su población envejecida, sino también invertir en el futuro de sus jóvenes, como lo demuestra la jornada deportiva para niños que fue realizada con las escuelas locales. Esto es un claro ejemplo de cómo la innovación de las nuevas tecnologías puede ser enraizada en la tradición y cómo soluciones modernas, como los tokens no fungibles, pueden fortalecer los lazos comunitarios y el bienestar colectivo.
La recaudación de más de $420.000 dólares también es testimonio del éxito del proyecto y de la voluntad de la gente de invertir en ideas que promuevan un cambio social positivo.
A medida que el mundo se vuelve cada vez más digital, proyectos como el de Yamakoshi muestran que la tecnología blockchain puede ser utilizada para unir a las personas y para construir un futuro inclusivo y más participativo. Por ello, con el continuo desarrollo y evolución de los activos digitales y la tecnología blockchain, en general, es probable que veamos más iniciativas como esta, donde la innovación digital se encuentra con las necesidades sociales, creando un impacto duradero en las comunidades de todo el mundo.
¿Cómo funciona el sistema de gobernanza en Yamakoshi?
El sistema de gobernanza en Neo-Yamakoshi Village se basa en una Organización Autónoma Descentralizada (DAO), que es una estructura de gestión innovadora impulsada por la tecnología blockchain. En este modelo, los tokens no fungibles actúan como identificadores y como tokens de gobernanza, lo que significa que cada NFT otorga a su propietario un voto en las decisiones comunitarias.
Los «ciudadanos digitales» que compran estos activos digitales se convierten en miembros de la DAO y pueden participar en la toma de decisiones sobre proyectos y políticas comunitarias. La DAO opera a través de una plataforma digital donde se proponen y votan iniciativas, y todos los votos son registrados y verificados en la blockchain para asegurar transparencia y seguridad.
Por otro lado, los residentes físicos de Yamakoshi reciben tokens Nishikigoi gratuitamente, mientras que los ciudadanos digitales externos deben adquirirlos. Esto permite que la comunidad local tenga una participación directa sin barreras económicas, al tiempo que se invita a personas de todo el mundo a contribuir al desarrollo del pueblo.
Como se informó, los fondos recaudados por la venta de tokens no fungibles se destinan al financiamiento de diferentes proyectos comunitarios y se gestionan de acuerdo con las prioridades establecidas por la comunidad a través de la organización de gobernanza descentralizada.
Gobernanza participativa
Al involucrar a «ciudadanos digitales» globales, Neo-Yamakoshi Village no solo obtiene financiación, sino que también fomenta una participación más amplia en la vida comunitaria, que se aprecia como una potencial solución a los desafíos que enfrentan muchas comunidades rurales, como la despoblación y el envejecimiento poblacional.
En resumen, Neo-Yamakoshi Village destaca el potencial de los NFTs y la tecnología blockchain para revitalizar comunidades y ofrecer nuevas formas de gobernanza democrática y participativa.