Un estudio realizado recientemente por Nic Carter, Dennis Porter y otros investigadores, resalta las propiedades de la minería de Bitcoin como catalizador de la transición energética.
El estudio, titulado “Leveraging Bitcoin Miners as Flexible Load Resources for Power System Stability and Efficiency”, señala el importante papel que Bitcoin y los mineros de la red están desempeñando para impulsar la generación y el uso de energía limpia.
En la actualidad, un mayor número de mineros en la red de Bitcoin están aprovechando las fuentes de energía renovable y energía limpia, como la hidroeléctrica, la eólica, la solar, la nuclear y la geotérmica, para sostener sus operaciones en la red blockchain de la manera más amigable y respetuosa posible con el medio ambiente.
Los mineros de Bitcoin también están aprovechando recursos energéticos que son desperdiciados por otras industrias, como los excedentes de gas, que se producen en la explotación petrolera y gasífera. Compañías como Exxon Mobil y Tokyo Electric Power Company, utilizan los excedentes de gas para producir energía y alimentar a equipos de criptominado, una acción con la que también contribuyen al cuidado y la protección de nuestro ambiente.
Como indica el estudio, además de aprovechar y monetizar estos recursos desperdiciados, con estas acciones, los mineros de Bitcoin también están ayudando a minimizar la quema de gas y a reducir las emisiones de carbono.
Carter y los otros investigadores que participaron en el estudio destacaron que, por todo lo anterior, la minería de Bitcoin se convertirá en un importante catalizador de la transición energética, estimulando la producción de energía limpia y renovable.
Bitcoin: Los cambios en la narrativa ESG
En el último año, la narrativa ESG (Environmental, Social and Governance), con relación a Bitcoin, ha dado un giro importante, pasando de acusar a la criptomoneda de ser un contaminador prominente a considerarla un elemento importante para la transición energética.
Daniel Batten, analista ESG y entusiasta de Bitcoin, publicó un artículo en Bitcoin Magazine destacando todos los cambios que se han producido en la narrativa ESG de Bitcoin este 2023, y que le han dado a la criptomoneda más capitalizada del mercado una oportunidad para demostrar su importante contribución a la estabilidad y a la eficiencia del sistema energético.
Batten señaló que, este año, la firma de servicios profesionales KPMG publicó un informe en el que concluye que Bitcoin respalda el imperativo ESG, facilitando la transición renovable, equilibrando las cargas eléctricas, reduciendo las emisiones de metano y de carbono e impulsando los beneficios del marco ESG, según destacó la firma.
Por otro lado, una investigación basada en la revisión entre pares, que fue realizada por los investigadores Juan Ignacio Ibáñez, de la DLT Science Foundation y Alexander Freier, del Centre for Blockchain Technologies del Colegio Universitario de Londres, encontró que la minería de Bitcoin puede ser buena para el medio ambiente, debido a que estimula la producción de energía limpia y contribuye a la estabilidad de la carga en las redes energéticas. El ejemplo más claro de lo anterior se aprecia en el estado de Texas (Estados Unidos), donde los mineros han estado colaborando con el gobierno estadal para consumir el excedente de energía de la red, desconectando los equipos en los momentos de mayor demanda y tensión, esto gracias a la adaptabilidad que permite la minería de Bitcoin.
El experto ESG también destacó el informe publicado por el Centro de Investigación de la Universidad de Cambridge, en el que reconoció que había sobreestimado el consumo de energía de la red Bitcoin. En dicho informe, el centro de investigación señaló que los mineros de Bitcoin han estado evolucionando conforme crece la industria cripto, por lo que el hardware de minería de BTC se ha vuelto más poderoso y eficiente a nivel energético.
El centro de investigación de la Universidad de Cambridge actualizó sus datos, compartiendo nuevas metodologías e índices que aportan métricas más reales y precisas sobre el uso energético de la red blockchain.
También, Batten hizo mención de los gráficos compartidos por Bloomberg Intelligence sobre la descarbonización, en donde muestra que la minería de Bitcoin ha estado liderando esta acción.
Por último, Batten mencionó el informe publicado por el Instituto de Gestión de Riesgos sobre la relación entre Bitcoin y la transición energética, que coincide con el informe publicado por Carter, recientemente. Ambos informes concluyen que la minería de Bitcoin está ofreciendo nuevas oportunidades para acelerar la transición energética. El instituto también destacó que Bitcoin puede convertirse en una posible solución a los desafíos energéticos globales.
Cada uno de estos informes se produjo de forma independiente y muestran cómo, en función de nuevos datos, los analistas y expertos han estado comprendiendo mejor el funcionamiento y el potencial de Bitcoin, provocando un cambio significativo en la percepción que se tiene sobre el impacto ambiental de la criptomoneda.
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