Varios inversores demuestran un creciente interés por las acciones de la multinacional alemana de servicios financieros y tecnológicos Wirecard, lo que incrementó en casi un 200% el valor actual de sus acciones. 

Recientemente Wirecard declaró que no podía cumplir con los pagos de las deudas a sus acreedores en el corto plazo, ya que se encontraba en estado de insolvencia económica debido a la situación actual que enfrenta la compañía. Wirecard, que hasta hace poco disfrutaba de acciones por un valor cercano a los 104 euros y una capitalización de más de 24.000 millones, experimentó una brutal caída en el valor de sus acciones que las llevó a valer solo 1,28 euros por acción. Un evento que causó la completa descapitalización de la multinacional tecnológica. 

Ahora, luego de sufrir la brutal caída, parece que las acciones de Wirecard vuelven a incrementar su valor. Varios inversores y compañías similares han demostrado su interés por las acciones de esta multinacional, por lo que el valor de las acciones de Wirecard en la Bolsa de Fráncfort experimentaron un crecimiento de casi el 200%. 

El reciente interés de los inversores y otras compañías de servicios financieros por las acciones de Wirecard llevó a un incremento de casi un 195% en el valor de estas. Actualmente las acciones de esta multinacional se posicionan en 3,26 euros a la fecha de esta publicación, y se estudia la posibilidad de la que otras empresas competidoras del sector o algún fondo de inversión adquiera la multinacional. Entre los interesados en Wirecard se encuentra Wordline, una compañía francesa dedicada también a brindar servicios tecnológicos en Francia y Europa. 

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El escándalo de Wirecard

Ha pasado muchos desde que se dio a conocer la noticia de que Wirecard, la multinacional alemana de servicios financieros y tecnológicos, presentó un gigantesco desbalance en el estado actual de sus cuentas. 

Casi una cuarta parte de los fondos de Wirecard no están disponibles

En principio, la compañía auditora de Wirecard, Ernst & Young (EY), señaló la manipulación de los balances de cuentas por parte de un administrador, para inflar y engañar a los auditores acerca del estado real de las cuentas de Wirecard. 

Gracias a esta auditoría se descubrió la falta de más de 1.900 millones de euros que representan casi la cuarta parte del efectivo que reflejaba la multinacional en sus cuentas. Así, en lugar de presentar el balance anual de la compañía, sus directivos anunciaron que retrasarián este evento hasta que se aclarara la situación con los fondos faltantes; señalando además que de no tener disponibles los estados financieros anuales de Wirecard para finales de junio, muchos de los préstamos otorgados por la multinacional podrán rescindirse. Sin dudas un completo escándalo. 

Renuncia de Markus Braun, presidente y fundador de Wirecard

Luego, a unos días de este hecho, el presidente y fundador de Wirecard, Markus Braun presentó su renuncia asumiendo la responsabilidad de la situación que enfrenta actualmente la compañía. Unos días más tarde, Braun fue arrestado por la autoridades alemanas y acusado de fraude y manipulación de mercado, y otros tantos directivos de la compañía también se vieron forzados a renunciar. 

Esta serie de eventos causó un desplome brutal en el valor de las acciones de la compañía, cayendo en más de un 80%, pasando de un valor cercano a los 104 euros a tocar los 25,82 euros por acción. Para este momento, Wirecard se consideraba una de las multinacionales tecnológicas más exitosas y reconocidas a nivel mundial; por lo que el escándalo y la posterior caída de sus acciones causó la descapitalización de la compañía en más de 20.000 millones de euros. 

Ordenan el cese total de los servicios de la compañía

Posteriormente, cuando el valor de las acciones parecía estabilizarse cercano a este nuevo valor, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) del Reino Unido emitió una medida regulatoria donde ordena el cese total de las actividades de Wirecard, por lo que varias de sus filiales y empresas asociadas se vieron en la obligación de suspender los servicios relacionados a esta multinacional. Este nuevo evento causó una nueva caída en las acciones, llegando a un valor de tan solo 1,28 euros por acción. 

Así mismo, con la orden de la FCA, las tarjetas de débito de criptomonedas manejadas por las empresas asociadas a Wirecard, Crypto.com, TenX, Wirex y Cryptopay fueron suspendidas, dejando a los usuarios de estas tarjetas con muchas dudas e incertidumbres. No obstante a pesar de la situación los CEO de estas compañías criptográficas se pronunciaron al respecto afirmando que los fondos de los usuarios disponibles en estas tarjetas no se verán afectados y que pronto anunciarán medidas para solventar la incómoda situación. 

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