En la Unión Europea, se ha legislado una nueva normativa de criptoactivos. Esta novedosa norma impulsa considerar a las criptomonedas como un capital que se declara en impuestos. Tarde o temprano iba a suceder. Muchos negocios, compras, pagos y préstamos se están haciendo con criptos. Y no se puede negar que Bitcoin es el gran protagonista de esta actividad económica que involucra divisas digitales. Para inicios del 2025, el precio del Bitcoin oscila entre los 60.000 y 83.000 dólares, pero en diciembre de 2024 sobrepasó los 100 mil. ¡Es la criptodivisa más importante!
Debido a su altísima cotización, Bitcoin está en la mira de la Agencia Tributaria. En España, ha ganado bastante popularidad y es una moneda digital que suele mantenerse como activo, siempre con la expectativa de que su valor suba. No obstante, su volatilidad hace que también sea vendida en los mercados por la especulación del ascenso y descenso de su precio. Todo esto ha hecho que esta cripto sea un capital en constante movimiento y es ahora un elemento susceptible de tributación.
Bitcoin y otras criptomonedas en la declaración de la Renta
¿Cómo se declaran las criptomonedas? Las monedas digitales tienen una doble condición: a veces son consideradas como un bien que se adquiere, pero también se catalogan como un capital con el cual se paga un servicio o producto. Esta doble consideración tiende a confundir a quienes declaran sus impuestos. Al respecto, se deben aclarar algunas disposiciones de la norma sobre tributos y declaración de criptomonedas, así como de otros activos digitales.
- No se declaran los Bitcoins si se compran en euros y se conservan. Cuando se adquieren Bitcoins y se tienen en la cripto billetera, se considera que las monedas virtuales son objetos o bienes por los cuales se paga.
- Se especifica que solamente se declaran las criptomonedas cuando un contribuyente, durante el año 2004, hubiese realizado operaciones de venta o intercambio con las criptodivisas.
- Si se compran criptos como Ethereum, u otras criptos diferentes al BTC, y se paga con Bitcoins, entonces se debe declarar como un pago. No existe la figura del intercambio de criptomonedas, pues el Bitcoin pasa a ser considerado un activo digital con el cual se pagan productos, objetos o servicios.
Los Bitcoins tienen una particularidad que no se puede obviar: la inestabilidad de su valor. Por ello, si aumentaron o bajaron de valor, implica que se debe declarar esa ganancia o pérdida. Es así como no se declara el valor del Bitcoin cuando es adquirido, pero sí se declara la variación posterior de su precio. Todo aumento del precio de esta criptomoneda es un incremento patrimonial, el cual se debe declarar ante el fisco.
Las criptomonedas, y sobre todo el Bitcoin, se interpretan de modo analógico a una ganancia por intereses. El cálculo tributario incluye la variación en la cotización de estos activos digitales en el tiempo. ¡Y en el caso del BTC esta variación es muy importante! Por ejemplo, en septiembre de 2024 el promedio del precio del Bitcoin era de 56.000 dólares, pero en noviembre alcanzó los 76.000 dólares. Esa diferencia de 20 mil dólares se debe declarar.
Los Bitcoins y el sistema bancario
La reciente normativa europea sobre criptodivisas ordena a las páginas de exchanges (Coinbase, Binance, Kraken, Bithumb, etc.) dar información sobre la tenencia y movimiento de criptodivisas. Esta disposición es obligatoria, ya que criptodivisas como el Bitcoin aún no se integran plenamente a los sistemas bancarios. Por este motivo, durante varios años hubo personas que compraban criptos para evadir impuestos; pero esta situación ha cambiado. En el caso de la Unión Europea, y en otros conjuntos de naciones en el planeta, ya se han redactado leyes para la supervisión y pago de impuestos relativos a criptomonedas.
Por lo general, la inspección de activos y capitales se hacía supervisando las cuentas bancarias de los contribuyentes, así como la tasación de sus propiedades. Ahora, esta comprobación se extiende a las criptomonedas, que son una combinación entre “capital” y “propiedad”. Las criptodivisas son declaradas para impuestos cuando se utilizan para efectuar pagos (como si fuesen dinero convencional). Además, pagan tributos cuando generan aumento de capital por la elevación de su valor, como ocurre con los inmuebles u otras propiedades. Todas estas facetas de las criptos son complejas. Por ello, las leyes sobre tributos han tenido que adaptarse para contemplar el abstracto y volátil orbe de las criptodivisas.
Errores que no se deben cometer al declarar Bitcoins en los formularios de impuestos
¡Las multas sobrepasan los 20 mil euros! Así que lo mejor es no equivocarse en las declaraciones de criptos. Por este motivo, hemos recopilado las principales equivocaciones que se deben evitar al declarar Bitcoins ante la Agencia Tributaria.
- No declarar los Bitcoins que se poseen. ¡Error! Es necesario siempre mencionarlos, con la salvedad de que no pagan impuestos si únicamente han sido adquiridos (no se declara el valor con el cual fueron adquiridos, pero sí su incremento de cotización).
- Otro error es no declarar las criptodivisas porque no están expresadas en euros. Por lo general, el mercado de criptos usa como referencia el dólar americano. Empero, esto no es excusa: hay que expresar el valor de las criptomonedas en euros, haciendo la debida conversión matemática entre dólares y euros.
- Hay que mencionar cuánto tiempo se han tenido las criptodivisas. Dependiendo de la cantidad de Bitcoins, o de satoshis que se posean; se aplican excepciones al pago de impuestos. No obstante, todos los Bitcoins de los cuales se tiene posesión durante más de un año pagan impuestos.
- Declarar siempre los intercambios de criptomonedas. Si, por ejemplo, se hizo un cambio de BTC por Ethereum, entonces se debe indicar dicha transacción, pagando impuesto por el valor resultante en el intercambio.
Resta decir que los ciudadanos deben ser responsables y no evadir impuestos usando criptomonedas. Estas monedas digitales están siendo cada vez más aceptadas en el comercio, así como en sistemas bancarios e instituciones de gobierno. El capital de las criptodivisas es real, es un valor patrimonial que debe ser declarado en los impuestos. Las nuevas legislaciones tributarias así lo reconocen.
