Bitcoin como reserva soberana: El oro 2.0 de las naciones en el siglo XXI

Bitcoin como reserva soberana: ¿La nueva fiebre del oro del siglo XXI?

Descubre qué países están considerando la adopción de Bitcoin como activo de reserva estratégica, para diversificar sus economías y garantizar su estabilidad frente a los desafíos del sistema financiero global.

El mundo está presenciando una transformación sin precedentes en el sistema financiero global. Bitcoin, la criptomoneda pionera y la más capitalizada en la actualidad, ha dejado de ser solo un activo especulativo para convertirse en una herramienta clave en las reservas estratégicas de naciones soberanas. 

Desde El Salvador en 2021 hasta Kenia en 2025, la adopción de Bitcoin como reserva de valor está ganando impulso en todo el mundo. Este fenómeno, comparado por muchos con la fiebre del oro del siglo XIX, está redefiniendo cómo los países protegen su riqueza y garantizan su estabilidad económica.

Estados Unidos: A la vanguardia de la innovación con Bitcoin

Aunque Estados Unidos aún no ha adoptado Bitcoin a nivel federal, está liderando una revolución financiera a nivel estatal que podría marcar un punto de inflexión en la historia de las criptomonedas. Actualmente, varios estados han propuesto regulaciones para reconocer a Bitcoin como un activo de reserva estratégico, reflejando un cambio profundo en la mentalidad política y económica del país. Entre estos estados, destacan iniciativas pioneras que están sentando las bases para una adopción más amplia.

En Ohio, por ejemplo, se presentó un proyecto de ley que permitiría al tesorero estatal invertir fondos públicos en Bitcoin. Asimismo, en Oklahoma, el representante Derek Merrin busca adoptar la criptomoneda para diversificar las estrategias financieras del estado y proteger su economía frente a la inflación y la devaluación del dólar. Merrin, quien presentó el proyecto «Ley de Libertad de Bitcoin», ha sido claro al afirmar que la criptomoneda está revolucionando las finanzas y que transformará las economías del mundo.

“Bitcoin, una criptomoneda descentralizada con un suministro fijo, se considera cada vez más como una cobertura contra la inflación. A diferencia de las monedas tradicionales, que pueden ser devaluadas por las políticas monetarias como hemos visto con el dólar estadounidense en los últimos años, Bitcoin ofrece una alternativa prometedora para preservar la riqueza”, señala el Senado de Oklahoma. 

New Hampshire, Texas y Dakota del Norte también han presentado proyectos de ley similares, con el objetivo de crear reservas estratégicas denominadas en BTC. En New Hampshire, el representante Keith Ammon ha liderado esta iniciativa, mientras que en Dakota del Norte, el proyecto cuenta con el respaldo de 11 legisladores, incluyendo al representante Nathan Toman y el senador Jeff Barta. Estos esfuerzos no solo buscan modernizar las finanzas estatales, sino también posicionar a estos estados como líderes en la adopción de tecnologías blockchain.

En el sur del país, Florida y Pensilvania también están explorando la inclusión de Bitcoin en sus tesoros públicos. En Pensilvania, los representantes Mike Cabell y Aaron Kaufer presentaron el «Pennsylvania Bitcoin Strategic Reserve Act», que permitiría asignar hasta un 10% de los fondos estatales en Bitcoin como cobertura contra la inflación

Todas estas iniciativas reflejan una tendencia creciente en la que Bitcoin es visto no solo como una inversión, sino como una herramienta para garantizar la estabilidad financiera a largo plazo.

La posible adopción de BTC a nivel federal

Sin embargo, el verdadero impulso a la adopción soberana de Bitcoin en Estados Unidos podría venir desde el nivel federal. 

La senadora Cynthia Lummis, una de las principales defensoras de Bitcoin en el Congreso, ha propuesto la creación de una reserva nacional de Bitcoin. Esta iniciativa, que ha ganado tracción en los últimos meses, cuenta con el respaldo del presidente electo Donald Trump, quien durante su campaña prometió convertir a Estados Unidos en la capital mundial de las criptomonedas. Trump incluso sugirió la posibilidad de firmar una orden ejecutiva para reconocer a la criptomoneda líder como un activo de reserva nacional y para garantizar la conservación de los BTC que posee el país producto de intervenciones como la de Silk Road. 

Actualmente, Estados Unidos lidera las reservas soberanas de BTC con un alijo de 207.189 BTC, según el portal Bitcoin Treasuries. Por tanto, si el presidente electo cumple sus promesas y declara a la criptomoneda un activo de reserva estratégico nacional, la medida tendría un impacto profundo en la adopción global de los activos digitales.

Tenencias de Bitcoin (BTC) por países, al 11 de enero de 2025.
Tenencias de Bitcoin (BTC) por países, al 11 de enero de 2025.
Fuente: Bitcoin Treasuries

Mientras tanto, el Departamento de Justicia recientemente recibió luz verde para vender 69.000 de los bitcoins incautados en la operación contra Silk Road, que fue uno de los mayores casos de confiscación de criptomonedas registrados en la historia. Esta autorización de venta, que se produce a pocos días de la ceremonia de toma de posesión de Trump, podría representar un desafío interesante para sus planes de cripto adopción. Según las promesas de campaña, estos BTC podrían ser utilizados por el gobierno federal para iniciar su propia reserva estratégica de Bitcoin. Aunque el Departamento de Justicia no se ha pronunciado, algunos expertos, como Dennis Porter, fundador y presidente de Satoshi Action, creen que Trump podría firmar una orden ejecutiva declarando a BTC como un activo de reserva en su primer día en el cargo.

En este contexto, Estados Unidos se encuentra en una encrucijada histórica. Por un lado, los estados están liderando el camino hacia la adopción de Bitcoin como reserva estratégica, demostrando que la innovación financiera no tiene que esperar a las decisiones federales. Por otro, el apoyo de figuras como Trump y Lummis sugiere que el país podría estar a punto de dar un salto significativo en su relación con las criptomonedas. Si estas iniciativas se materializan, no solo transformarán la economía estadounidense, sino que también podrían inspirar a otras naciones a seguir el mismo camino.

En definitiva, lo que está ocurriendo en Estados Unidos no es solo una tendencia local, sino un movimiento global que está redefiniendo el futuro del dinero, y en el centro de esta revolución, Bitcoin se consolida como el nuevo oro digital del siglo XXI.

América Latina: Siguiendo los pasos de El Salvador

Desde que El Salvador hizo historia en 2021 al adoptar Bitcoin como moneda de curso legal, otros países de la región han comenzado a explorar cómo este activo digital puede transformar sus economías. De acuerdo con los expertos, este movimiento no solo refleja una búsqueda de innovación financiera, sino también una necesidad urgente de reducir la dependencia del dólar estadounidense y enfrentar desafíos como la inflación y la inestabilidad monetaria.

En Argentina, por ejemplo, el diputado Martín Yeza presentó un proyecto de ley que busca que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) compre, resguarde y mine BTC, además de mantener parte de sus reservas en esta criptomoneda. Esta iniciativa, que ha generado un intenso debate en el país, apunta a diversificar los activos del Banco Central y proteger la economía argentina frente a la volatilidad del peso y la inflación, que superó el 200% en 2024. 

Por su parte, Brasil también está dando pasos significativos hacia la adopción de la criptomoneda como reserva estratégica. El diputado Eros Biondini propuso la creación de una «Reserva Estratégica Soberana de Bitcoin» (RESBit), que limitaría las inversiones en BTC al 5% de las reservas totales del país. Esta propuesta, que ha sido bien recibida por sectores tecnológicos y financieros, busca no solo diversificar las reservas internacionales de Brasil, sino también modernizar su sistema financiero y atraer inversiones en blockchain. 

Tanto Yeza como Biondini han destacado que la criptomoneda reina podría ser una «herramienta de soberanía financiera» gracias a su oferta limitada y su naturaleza descentralizada. 

Una herramienta de empoderamiento y libertad financiera

No obstante, además de las propuestas para reconocer a BTC como activo de reserva estratégico, los países de América Latina, con sus economías en desarrollo y su alta adopción de tecnologías digitales, están demostrando que las criptomonedas pueden ser más que activos especulativos, y convertirse en herramientas para garantizar la estabilidad financiera y la soberanía económica.

En este contexto, países como Venezuela, Colombia y México están haciendo de la región un laboratorio de innovación financiera, donde BTC y las criptomonedas están desempeñando un papel clave en la transformación de las economías locales. Y aunque los desafíos son muchos, especialmente regulatorios, el camino hacia la adopción soberana de estos criptoactivos en América Latina ya está trazado, marcando el inicio de una nueva era en la historia financiera de la región.

África y Asia: Los nuevos frentes en la adopción soberana

África y Asia están emergiendo como líderes en la adopción de BTC como reserva estratégica, marcando un hito en la transformación de sus sistemas financieros. Estos continentes, caracterizados por economías en desarrollo y una alta adopción de criptomonedas, están viendo en Bitcoin una oportunidad única para modernizar sus economías y reducir su dependencia de monedas tradicionales.

En Kenia, por ejemplo, el gobierno ha dado un paso histórico al integrar la criptomoneda como parte de su estrategia de reservas. Este país está redactando una legislación para regular las criptomonedas y aprovechar su potencial como activo de reserva. Con esta iniciativa, Kenia no solo busca diversificar las reservas internacionales, sino también fortalecer su posición en el escenario financiero global.

Por su parte, Nigeria, con una de las poblaciones más jóvenes y tecnológicamente avanzadas de África, también está considerando seriamente la regulación de Bitcoin, en medio de la creciente adopción de la criptomoneda por parte de sus ciudadanos, que ven en Bitcoin una herramienta para combatir la inflación y modernizar su sistema financiero.

Más allá de África, Rusia también está explorando el potencial de Bitcoin como reserva estratégica. El diputado Anton Tkachev propuso en diciembre la creación de una reserva nacional de Bitcoin, argumentando que esta medida podría reducir la dependencia de monedas tradicionales en un contexto geopolítico desafiante.

Los legisladores de Japón también están dando pasos significativos hacia la adopción de Bitcoin. A pesar del rechazo del gobierno a la criptomoneda, el legislador Satoshi Hamada presentó una solicitud formal a la legislatura para discutir la creación de una reserva nacional de Bitcoin. La propuesta, que ha generado un intenso debate en el país, busca diversificar las reservas internacionales de Japón y aprovechar el creciente interés global en las criptomonedas.

Acelerando la innovación con blockchain

En Asia, países como Vietnam y Filipinas también están liderando la regulación de las criptomonedas y el desarrollo de tecnologías blockchain. Estos países, impulsados por el creciente interés de sus ciudadanos en las criptomonedas, están explorando cómo las nuevas tecnologías pueden contribuir a la estabilidad económica y al crecimiento tecnológico. En este contexto, África y Asia están demostrando que Bitcoin no es solo un activo especulativo y que la tecnología blockchain puede ser una herramienta poderosa para transformar las economías e impulsar el desarrollo.

Europa: Bitcoin como herramienta geopolítica

Europa está experimentando un cambio de paradigma en su relación con las criptomonedas, especialmente con Bitcoin, que cada vez más países consideran como una herramienta para fortalecer sus economías. En este contexto, naciones como Polonia, Eslovenia y la República Checa están evaluando seriamente la creación de una reserva estratégica en esta criptomoneda. 

Estas iniciativas no solo buscan diversificar las reservas internacionales, sino también proteger sus economías frente a la inflación y la volatilidad de las monedas tradicionales. En Polonia, por ejemplo, un candidato presidencial prometió crear una reserva de Bitcoin si es elegido, mientras que en la República Checa, el Banco Central está analizando el potencial de BTC como activo de reserva.

Pero el movimiento no se limita a Europa central. En Reino Unido, el tercer país con mayor tenencia de Bitcoin a nivel soberano, el debate sobre la adopción de esta criptomoneda como activo de reserva estratégico ha ganado fuerza. Nigel Green, director ejecutivo de Devere Group, una firma especializada en la gestión de patrimonios y asesoramiento financiero, ha instado al gobierno del Reino Unido a establecer una reserva nacional de Bitcoin. Green hizo una analogía entre esta propuesta y las iniciativas recientes que se desarrollan en Estados Unidos bajo la próxima administración del presidente Donald Trump, quien ha prometido transformar a su país en la capital global de las criptomonedas.

Green argumentó que, al igual que en Estados Unidos, el Reino Unido podría beneficiarse enormemente de la adopción de Bitcoin como reserva estratégica. Además, destacó que la creación de una reserva nacional de esta criptomoneda podría posicionar al Reino Unido como uno de los líderes en la innovación financiera, atrayendo inversiones y talento en el sector blockchain.

En este escenario, Europa y el Reino Unido están demostrando que Bitcoin no es solo una tendencia pasajera, sino una herramienta clave para el futuro de las finanzas globales. A medida que más países se suman a esta revolución, Bitcoin se consolida como el nuevo oro digital del siglo XXI, redefiniendo el concepto de reservas estratégicas y fortaleciendo las economías en un mundo cada vez más digital.

El impacto de la adopción de Bitcoin: ¿Qué dicen los expertos?

La adopción de Bitcoin como reserva estratégica está generando un impacto profundo en el sistema financiero global, y su relevancia sigue creciendo a medida que más países exploran su potencial. Según expertos y análisis recientes, como el publicado por CoinShares, esta tendencia no solo representa una alternativa al dólar estadounidense, sino que también podría redefinir la estructura económica mundial.

En primer lugar, Bitcoin ofrece una solución tangible para reducir la dependencia del dólar. Según CoinShares, actualmente muchos países están expuestos a las fluctuaciones de la política monetaria estadounidense, lo que limita su autonomía financiera. Por ello, al diversificar sus reservas con Bitcoin, estas naciones pueden mitigar riesgos y fortalecer su posición en el escenario global. Además, la naturaleza descentralizada de Bitcoin proporcionaría una capa adicional de seguridad a estas naciones frente a posibles sanciones o intervenciones externas. 

Otro aspecto clave de la criptomoneda es su capacidad como protección contra la inflación. Con una oferta limitada a 21 millones de monedas, Bitcoin actúa como un escudo frente a la devaluación de las monedas fiat, especialmente en economías con altos niveles de inflación. Este atributo convierte a BTC en una herramienta atractiva para países que buscan preservar su riqueza a largo plazo.

La modernización financiera es otro beneficio destacado. En regiones en desarrollo, donde los sistemas bancarios tradicionales son limitados, Bitcoin y su tecnología subyacente pueden acelerar la inclusión financiera y facilitar transacciones internacionales más eficientes. Esto no solo mejoraría la competitividad económica, sino que también abriría nuevas oportunidades para el crecimiento sostenible.

En cuanto al impacto en el precio de Bitcoin, los expertos de CoinShares sugieren que la creación de una reserva estratégica en Estados Unidos podría llevar su valor a más de un millón de dólares por moneda. Este escenario, aunque ambicioso, refleja la creciente confianza en Bitcoin como activo de reserva global.

 «La aprobación e implementación de la Ley Bitcoin, otorgando efectivamente a Bitcoin el respaldo del gobierno más grande del mundo, disminuiría significativamente el estigma que enfrentan los inversores institucionales. Combinado con otros gobiernos que siguen su ejemplo, tal desarrollo podría catalizar un flujo mucho mayor de activos en Bitcoin en los próximos años», dijo CoinShares.

En conclusión, la adopción de Bitcoin como reserva estratégica ya no es una idea futurista, sino una realidad que está transformando el sistema financiero global. Desde Estados Unidos hasta Kenia, los países están reconociendo su potencial para diversificar sus economías, proteger su riqueza y garantizar su estabilidad frente a los desafíos del siglo XXI. Como dijo el CEO de Blockstream, Adam Back, «Bitcoin no es solo una moneda, es una revolución financiera». Y esta revolución apenas comienza.