Las Bahamas ha promulgado la Ley de Activos Digitales e Intercambios Registrados de 2024 (DARE 2024) para regular de forma más ágil y robusta las actividades financieras que se realizan con criptomonedas y activos digitales.
La reciente promulgación de la Ley DARE 2024, por parte del Parlamento de las Bahamas, representa un avance significativo para la nación en su camino hacia la creación de un marco regulatorio más robusto y efectivo para el creciente mercado de criptoactivos.
Esta nueva legislación se apoya sobre los cimientos de la Ley DARE de 2020 e introduce reformas integrales significativas para adaptarse a la dinámica del mercado. Todo esto, con la finalidad de consolidar la posición del país en el ámbito de la economía digital y la innovación financiera.
La nueva ley cripto de las Bahamas enfocada en los inversores
La Ley DARE 2024 amplía el alcance de la regulación de activos digitales existente, incluyendo los servicios de asesoramiento o gestión de criptomonedas, los mercados de derivados de criptoactivos y los servicios de participación o staking, manteniendo un enfoque en la protección y seguridad de los inversores y consumidores de criptoactivos. Esto, mediante la implementación de requisitos más estrictos de sistemas y controles en el mercado.
Además, según lo comunicado por la Comisión de Valores de las Bahamas, la nueva ley cripto también establece un marco sólido para la custodia de activos digitales y prohíbe explícitamente las monedas estables algorítmicas, alineándose con las mejores prácticas internacionales y las recomendaciones de organismos de normalización.
Todas estas medidas buscan hacer de las Bahamas una jurisdicción para la innovación, fortaleciendo su posición como centro financiero confiable en el sector de los activos digitales.
Se autoriza la inclusión de nuevas actividades de criptomonedas
En la elaboración de la DARE 2024 también se abordaron aspectos clave como la ampliación del ámbito de aplicación, la protección del inversor y del consumidor, y la custodia de activos digitales.
Con un enfoque en la adaptabilidad, la nueva ley de las Bahamas permite la inclusión de nuevas actividades relacionadas con las criptomonedas, los tokens y los activos digitales, lo que se alinea a la perfección con la naturaleza en constante evolución del espacio cripto.
Por otro lado, la ley señala que las plataformas o mercados de activos digitales están sujetos a requisitos más estrictos de control con el fin de garantizar la seguridad y la integridad de las transacciones en todo momento. Esto, subraya el compromiso del país con la protección de los inversores de criptoactivos. Asimismo, en línea con lo anterior, la nueva ley DARE 2024 también introduce un marco sólido para la custodia de activos digitales, mejorando así la protección de los intereses de los clientes y garantizando la accesibilidad de los activos digitales.
Christina Rolle, directora ejecutiva de la Comisión de Valores del país, enfatizó que la aprobación y puesta en marcha de la Ley DARE 2024 “representa un nuevo estándar en la regulación de activos digitales y es un testimonio de nuestro compromiso con una sólida gestión de riesgos”.
DARE 2024: Fomentando la innovación responsable
Por primera vez, las Bahamas establece un régimen de divulgación para el staking de criptomonedas y la operación de pools de staking, lo que añade una capa adicional de transparencia al sector, al mismo tiempo que manifiesta el interés del país por estar a la vanguardia de la innovación tecnológica.
En cuanto a las stablecoins, la ley DARE 2024 proporciona una definición clara para estos criptoactivos y establece requisitos para su registro y gestión, incluyendo la prohibición de las stablecoins algorítmicas, lo que refleja una postura cautelosa hacia las innovaciones que podrían presentar riesgos significativos para los inversores y usuarios.
También, se refuerzan las medidas de protección de los inversores con normas de idoneidad para los emisores de activos digitales y nuevos requisitos de divulgación e información financiera, asegurando que los participantes del mercado operen con la máxima transparencia y responsabilidad, para evitar fraudes como el de FTX.
Por último, la Ley DARE 2024 establece un marco legal estricto que aborda de manera integral los conflictos de intereses y las interacciones con terceros en el mercado cripto. Esta legislación también categoriza los tokens no fungibles (NFT), establece estándares de liquidez e información, y toma medidas para proteger la privacidad y la sostenibilidad ambiental del mercado, al introducir ciertas restricciones para la minería de criptomonedas en el país.
Con estas disposiciones, la Ley DARE 2024 busca equilibrar la innovación en el espacio de los activos digitales, al mismo tiempo que mantiene la protección del consumidor y la integridad del mercado financiero.
