Creada con base en estudios científicos: es la blockchain del futuro

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La blockchain es la tecnología subyacente para las finanzas descentralizadas (DeFi) y para el funcionamiento del sistema de criptomonedas. Pero, esta sirve para muchas otras aplicaciones más. Podríamos, incluso, afirmar que podemos emplearla de infinitas maneras, siempre y cuando se requiera de una base de datos.

Para ser más claros: ahí donde haya cúmulos considerables de datos que requieran almacenamiento, sistematización y consulta, la blockchain puede ser una solución. En consecuencia, sirve para las empresas, las universidades, los entes gubernamentales y toda base de datos. Entonces, puede ser de gran utilidad en las investigaciones científicas y académicas, tanto para las universidades como para organizaciones públicas y privadas que desarrollen estudios de diversas índoles.

¿Cómo funciona la blockchain para guardar datos?

La blockchain es una base de datos que funciona como un sistema equiparable a los usados en contabilidad, pero de manera digital. Este es descentralizado, lo cual es su mayor rasgo y lo que lo diferencia de otras bases de datos.

Ningún estado, gobierno o institución tiene el control de esta base de datos: es abierta y pública. La información se almacena en bloques. De allí su nombre de cadena de bloques. Cada bloque está vinculado entre sí en una sucesión criptográfica codificada.

Cada uno de estos bloques contiene tres elementos que también son inherentes y propios de la blockchain:

  • Los datos que se guardan en él y que van llenando cada bloque.
  • Un hash único que sirve identifica al bloque que contiene la información específica que se almacena en él.
  • Un hash del bloque anterior en la misma cadena que ayuda a rastrear mejor la información cuando un usuario la busca.

Cuando un bloque se llena de información, se agrega un nuevo bloque para albergar datos. Lo particular en este proceso es que este debe ser validado por una red de nodos u ordenadores. Esto se hace para verificar la autenticidad de los datos a través de un protocolo de consenso.

Una vez que un bloque es validado, este se añade de forma permanente a la cadena. En este sentido, cualquier intento de modificarlo, borrarlo o alterar los datos contenidos en él será necesario cambiar todos los bloques de la cadena y esto es imposible por el nivel de seguridad criptográfica de la base y la descentralización de la cadena.

Esto certifica que todos los datos de la blockchain sean inalterables y hace de la base de datos algo transparente y segura. Es por esta razón que estamos ante una manera ideal para almacenar información de investigaciones científicas o académicas que van desde transacciones financieras a contratos inteligentes, registros, bibliografías y muchos más.

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La blockchain para estudios científicos y los retos del futuro

La tecnología blockchain como herramienta para los investigadores es una aliada para revolucionar los estudios científicos. La cadena de bloques proporciona un sistema de almacenamiento de información transparente, seguro e inviolable, lo cual es esencial para el guardar, manejar y acceder a los datos.

En el ámbito de la investigación facilita la categorización de estudios, su avance, permite la verificación de resultados, garantiza la trazabilidad y democratización de los datos y, lo más importante, fomenta la colaboración abierta y descentralizada entre investigadores, independientemente del lugar del mundo en el cual se encuentren. Esto es lo que ofrece la blockchain para estudios científicos:

Integridad de los datos

En todo estudio en ciencias sociales, aplicadas, exactas y de salud, entre otras, la blockchain hace posible que los investigadores registren los datos de sus trabajos de manera concatenada y cronológica.

De esta manera garantizan que no puedan ser alterados o manipulados. Esto es esencial para preservar la credibilidad, autoría y la transparencia en los resultados de cada estudio en sus diversas fases.

Colaboración y acceso global y seguro

Los datos de estudios científicos almacenados en la blockchain son públicos. Esto facilita la colaboración entre investigadores de todo el mundo en laboratorios, instituciones públicas y privadas y/o universidades de cualquier país del mundo.

A la vez, proporciona una plataforma segura, encriptada y descentralizada para compartir información, metodologías, resultados por etapas y finales y recursos empleados sin peligro de que se borren o que fallen por problemas con los servidores.

Garantía propiedad intelectual

Como esta base de datos es inalterable y cada bloque posee su hash único identificable, esta tecnología sirve para proteger los derechos de autor en las investigaciones o fases de ellas con miras a resultados palpables.

Es útil para dar fe de las patentes, pero también para registrar las contribuciones de otros investigadores que participan de una u otra forma y que permiten obtener determinadas conclusiones para fines prácticos. Esto asegura el reconocimiento adecuado de cada profesional involucrado en los trabajos.

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Transparencia en la financiación e incentivos para la investigación

Toda investigación requiere recursos económicos. Pero, los patrocinadores o financistas piden a cambio una retroalimentación para conocer cómo y para qué se invierten los recursos que ceden.

En proyectos financiados por terceros, la blockchain garantiza esto, ya que permite hacer seguimiento minucioso, claro y transparente del uso de los fondos en cada etapa. Esto aumenta la confianza tanto en los investigadores como en los patrocinadores.

Por otra parte, los contratos inteligentes que circulan en la blockchain hacen posible crear sistemas de recompensas o pagos para los investigadores que los incentivan a compartir sus datos o a ser colaboradores en proyectos similares o específicos.

Acceso descentralizado al conocimiento

En el caso de que existan investigadores trabajando en proyectos afines en diversas partes del planeta, la blockchain permite acceder a estos estudios y, de esta manera, los investigadores pueden alimentarse de bibliografía, metodologías o procesos.

Esto en virtud de que estas plataformas descentralizadas son ideales para compartir publicaciones científicas, procesos y datos que reducen la dependencia y los costes asociados de intermediarios como revistas u otros productos de editoriales sin menoscabo a los derechos de autor. De esta manera, la blockchain promueve el acceso democrático y descentralizado al conocimiento.

Acreditación académica

Con la masificación de internet y la creación de programas de formación online, las instituciones como universidades u organizaciones pueden usar la blockchain para emitir certificaciones, diplomas o títulos digitales fácilmente verificables que evitan el fraude académico. Estos pueden ser consultados por los empleadores sin problemas.